sábado, 26 de noviembre de 2016

La manía de algunos conductores de acelerar cuando hay un gran charco...cerca de algún peatón...




Esta imagen que parece sacada de una película de humor, por desgracia, es más corriente de lo que parece. 
He comprobado personalmente que después de un día de lluvia, son muchos los conductores que se divierten pasando por encima de grandes charcos con la intención de mojar a los peatones que se encuentren cerca. Lo educado y cívico sería bordearlo aminorando la velocidad, no acelerando y pasando justo por encima.
Entiendo que muchos conductores no se dan cuenta hasta que no ven la cortina de agua por el lateral de su coche y oyen un grito de desaprobación de un pobre peatón que acaba de ser bañado de arriba a abajo. Pero muchos otros lo hacen con premeditación y alevosia escogiendo a sus víctimas con cautela cuando están distraídas o están cruzando por dónde no deben.
De hecho esta mañana iba yo con el perro y como había llovido la noche anterior, las aceras y carreteras estaban aún muy mojadas y se habían formado varios charcos de grandes dimensiones en socavones y rincones. Pues como decía, paseaba con el perro y he tenido la gran suerte de caminar por una acera bastante ancha, ya que de repente ha pasado un vehículo de grandes dimensiones a toda mecha, cuando la velocidad de la vía obliga a ir a cincuenta kilómetros hora porque hay una señalización de escuela, levantando a su paso una cortina de agua considerable que habría empapado a cualquiera que hubiese estado a medio metro de allí. Las pocas personas que paseábamos hemos tenido la gran suerte de encontrarnos bastante lejos del lugar de la cascada de agua porque sino, no me quiero imaginar como habría llegado a mi casa. 
Lo más divertido es que el tipo ha seguido con esa velocidad hasta el final de la calle, no ha aminorado en ningún momento, es más, me atrevería a decir que incluso ha acelerado. En esos momentos habría deseado que un policía hubiese estado cerca...pero seamos francos, en mi pueblo pocas veces están cuando se les necesita. Siento ser así de sincera y directa, pero es la gran verdad.
Y estoy completamente segura de que este tipo volverá a hacer lo mismo en cuanto tenga ocasión, circular a una velocidad no apropiada con el agravante de poder provocar un accidente y seguir con la intención de hacer la gracia para fastidiar a algún viandante. Quizá es que recibe puntos extras por comportarse como un energúmeno sin escrúpulos ni conciencia alguna.
Esto sólo me demuestra una vez más la clase de sociedad de mierda en la que estamos viviendo, sin educación ni respeto. Porque si hubiese un guardia dónde toca, quizá estas cosas no pasarían y podríamos evitar más accidentes y desgracias, cosa que hace bastante falta.





Gubi's place.



No hay comentarios:

Publicar un comentario